Habitación minúscula, menos que una cabina de ferry. Decepcionante y un fracaso para el precio que cuestan las habitaciones. Limpieza escasa, hasta en los pasillos del hotel huele mal y las alfombras están muy sucias. El hotel no tiene ascensor. Lo único bueno fue el parking, el aire acondicionado y la persona que nos hizo el checkin, muy amable que además nos habló en español. Por lo demás, tienen un suspenso.