El apartamento daba una gran sensación de dejadez: manchas en las paredes, ventanas rotas que no cerraban (que siendo un primero da inseguridad), muebles rotos, algún que otro bicho en los colchones, etc. Muy defraudados para el precio que pagamos. Además la zona de playa no es que sea una maravilla para justificar ese precio. Además faltaban muchos productos básicos como papel higiénico, balletas o esponjas para limpiar la vajilla.